Por fin, la Comisión Europea ha decidido castigar a Polonia por violar los valores democráticos. Ante las nuevas leyes aprobadas en el país, que han acabado de un mazazo con la independencia de la justicia y dificultan la celebración de unas elecciones libres, la UE se ha visto obligada a intervenir para proteger los derechos y libertades más fundamentales de la ciudadanía polaca.
Antes de que el gobierno ultraconservador de Polonia tenga que enfrentarse a cualquier sanción, el Consejo Europeo de Jefes de Estado o de Gobierno de la UE debe votar: 4 de cada 5 dirigentes debe estar de acuerdo en que la democracia en Polonia está en peligro.
Pero el proceso está estancado, nadie parece querer entrar en peleas diplomáticas. Mientras, el gobierno polaco continúa despojando a su pueblo de sus derechos y libertades: la libertad de prensa, la independencia de la justicia, el derecho a manifestarse, etc.
Estamos pensando lanzar una campaña a escala europea y presionar a nuestros dirigentes para que defiendan el derecho de la ciudadanía de la UE a vivir en países libres, democráticos y abiertos. El primer paso es demandar al Consejo que deje de aplazar la votación y active el artículo 7 contra Polonia. Solo nos quedan dos semanas para conseguir que la votación sea incluida en la agenda de su reunión de marzo. ¡No hay tiempo que perder!